miércoles, 24 de febrero de 2010

sigo mosqueada

Nada, aqui estoy reveindicando mi mosqueo con jazztel, sigo esperando mi teléfono con identificador de llamada, miro el router y pienso cuan "mono" estaría destrozadito del impacto contra la pared y observo que la velocidad ha subido, si señores, ha subido...hasta 5,6 megas. Espero que cuando acabe su tan esplendorosa oferta allá por septiembre y yo me plantee volver a cambiar de operador haya conseguido llegar a los 20 megas prometidos, no por nada en especial, simplemente por curiosidad.

viernes, 19 de febrero de 2010

Si a alguien le pasa lo mismo me lo diga

Consiguieron los comerciales de jazztel agregarme a su compañía después de varios meses de llamarme a casa y al móvil. Tres de sus ventajas por las que debía cambiarme eran:
  1. La velocidad conseguida sería de 20 megas, facilmente alcanzables debido a la situación geográfica en la que me encuentro.
  2. Regalo de un router que era la caña, casi recien estrenado en la NASA, con unas pretaciones que vaya usted que maravilla, y lo mejor de todo, su precio, en el mercado no lo iba a conseguir por menos de 120 euros.
  3. Y por si lo de antes no me convencía, me iban a regalar un teléfono con pantalla identificadora de llamadas que iba a ser la envidia de conocidos y, también de desconocidos.
Me convencieron, no sé que me pasó, porque desconfio de ellos, de todos ellos (llámese Jazztel, Telefónica, Ono, Ya.com, Tele2, etc...).
Pero pensé: mi actual operador me sale caro, le soy fiel desde hace años y nunca me hace ofertas ni se acuerda de mí, ¡pues me cambié!.
Bueno, pues de las tres razones por las que me tenía que cambiar ninguna de las tres han sido capaces de cumplir:
  1. Velocidad máxima alcanzada después de una semana de uso: 2 megas (de pena).
  2. El router normalito tirando a flojo que seguro ya está descatalogado.
  3. El teléfono no sé, nunca supe nada de él (¡Sniff!)
Lo bueno, no tengo compromiso de permanencia, por lo que ruego a mi antigua compañia se vuelva a poner en contacto conmigo, por supuesto ofreciéndome un precio interesante, y yo tendré a bien estudiar su oferta para un posible cambio.